Archivos de febrero, 2014

25 / 02 / 2014 | Noticias Gremiales    

En defensa del salario,

por la aprobación del Convenio Colectivo de Trabajo

y contra la especulación financiera


Documento del Plenario de Secretarios Generales de CONADU

Defensa del salario ante las maniobras especulativas

 Las acciones desestabilizadoras protagonizadas por los grupos de poder económico concentrado, no son nuevas ni en nuestro país ni en el resto de Latinoamérica. El desabastecimiento, las corridas de precios así como los intentos más o menos velados por presionar a gobiernos legítimamente constituidos, tienen lugar toda vez que gobiernos de corte popular toman decisiones a favor de una justa distribución de la riqueza. Este ha sido un hecho recurrente en la historia Argentina y, sin dudar, los repudiables intentos de destitución en Venezuela también deben ser puestos en este mismo contexto.

 En el transcurso de la última década, hemos vivido un proceso inédito de avance de los sectores populares, en el marco de una gradual y dificultosa recuperación de la capacidad del estado nacional para defender el interés de la mayoría. El inicio de este proceso de democratización de la sociedad argentina, que nos ha permitido comenzar a revertir los efectos nefastos de décadas de entrega de la república a la avidez del poder económico, nos ha colocado ante nuevos desafíos y ha reeditado viejas amenazas. Para poder sostener y profundizar este rumbo, se ha tornado cada vez más urgente resolver aquellas asignaturas pendientes que obstruyen la posibilidad de asegurar una justa distribución de la riqueza, condiciones de vida digna y un horizonte de futuro para todos y todas. Pero también para preservar lo que hasta ahora hemos logrado: para que nuestra democracia sea cada vez menos vulnerable a la extorsión y las maniobras de una minoría que aún conserva una enorme capacidad de daño, y que demuestra recurrentemente que no está dispuesta a confrontar en la arena política democrática su proyecto de un país para pocos.

[+]

25 / 02 / 2014 | Cursos de capacitación    

Este curso propone trabajar los conceptos fundamentales de manipulación y análisis de imágenes necesarios para entender y usar herramientas dirigidas a la cuantificación de atributos de interés en anatomía y morfología vegetal.

Actualmente se dispone de herramientas digitales variadas y de libre acceso que permiten analizar imágenes digitales con alta precisión y con un alto grado de automatización o rapidez. La combinación de herramientas y técnicas también permite análisis más elaborados que de otra manera no serían factibles o por su laboriosidad,  su costo/beneficio sería muy elevado, abriendo las posibilidades a resultados novedosos.

Docente responsable: Ms.Sc. Damián Cirelli

Cupo: 10 participantes

UVACs: 1

Horario: 10, 11 y 12 de marzo de 9 a 12 y de 13 a 16 hs.

Lugar: aula 123 del edificio de Agronomía, Balcarce.

Comienza: Lunes 10 de marzo de 2014.

Inscripción: En sedes de a.d.u.m.

Cs. Económicas: Todos los días de 10:00 13:00 y de 13:30 a 16:30 hs.

Cs. Agrarias: Lunes y Miércoles de 13 a 16 hs.

Colegio Illia: Martes de 9:30 a 10:30 hs. Viernes de 13:30 a 14:30 hs

Derecho: Lunes de 10 a 12 hs y de 16 a 18 hs Martes de 15 a 17 hs y Jueves de 16:30 a 17:30 hs.

Ingeniería: Lunes de 13:30 a 15:30 hs, Miércoles de 10:30 a 12:30 hs y de 14 a 16 hs y Jueves de 14 a 16 hs.

Anexo Ingeniería: Miércoles de 8:30 a 10 hs. Viernes de 9:30 a 11:00 hs.

18 / 02 / 2014 | Derechos humanos    

Las Abuelas de Plaza de Mayo tenemos la enorme alegría de informar que hemos encontrado a la hija de Oscar Rómulo Gutiérrez y Liliana Isabel Acuña, desaparecidos el 26 de agosto de 1976. Liliana cursaba entonces el quinto mes de embarazo.

El 31 de octubre de 2013, una joven se acercó a Abuelas con dudas sobre su identidad y fue recibida por el equipo de Presentación Espontánea de nuestra institución. Ante los fuertes indicios de que podría tratarse de una hija de desaparecidos, fue derivada inmediatamente a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) para que se ordenara la realización del examen de ADN.

Felizmente, los resultados del análisis efectuado en el Banco Nacional de Datos Genéticos indicaron que la joven es la hija de Liliana y Oscar.

 Sus padres

Liliana Acuña nació en la ciudad de Buenos Aires el 30 de mayo de 1952. Oscar Rómulo Gutiérrez nació el 17 de abril de 1951 en La Tablada, provincia de Buenos Aires. Ambos eran militantes de la organización Montoneros. Oscar era hincha de Independiente, sociólogo, se había inscripto en la carrera de Ciencias Económicas y trabajaba como empleado administrativo en una empresa metalúrgica. Liliana estudió algunos años la carrera de Veterinaria y luego se pasó a Agronomía. Trabajaba dando clases particulares de Matemáticas.

El 26 de agosto de 1976, aproximadamente a las 6.30 de la mañana, el matrimonio fue secuestrado en su domicilio de la localidad de San Justo, en el partido bonaerense de La Matanza. El operativo fue llevado a cabo por doce hombres vestidos de civil que portaban armas largas e irrumpieron bajo amenazas de muerte en la vivienda. Ese mismo día, en ese operativo, también secuestraron a la hermana de Liliana, Elba Eva Acuña, y su esposo Hugo Alberto Saez.

Oscar y Liliana, embarazada de cinco meses, fueron introducidos por la fuerza en un automóvil. Posteriormente, un grupo de hombres de civil saqueó los bienes del matrimonio. Fueron  trasladados  a  la  Comisaría 4º del partido de San  Isidro, denominada “Las Barrancas”,  provenientes  de  otro  sitio  con  evidentes  signos  de  haber sido  torturados.

La pareja fue alojada junto a otras doce personas en el sótano de esa comisaría, en un sector especial con acceso restringido al personal policial. Dependían directamente del Área 420 del Ejército Argentino, bajo jurisdicción de la Escuela de Comunicaciones de Campo de Mayo.

A través de un agente de esa comisaría, los familiares de Liliana y Oscar pudieron saber que los jóvenes estaban con vida, aunque en pésimas condiciones, y que el embarazo seguía adelante. El mismo agente, tiempo después, les contó que Liliana había dado a luz a una nena en San Martín, en diciembre de 1976 o enero de 1977.

Luego de que las autoridades de la Comisaría tomaran nota del contacto de este agente con los familiares de los detenidos, Oscar, Liliana, Elba, Hugo y el resto de sus compañeros de cautiverio fueron trasladados hacia un lugar desconocido. Toda la familia permanece desaparecida. Sin embargo, gracias a los avances de la justicia el caso de Oscar y Liliana permitió que Santiago Omar Riveros fuera condenado en 2013 durante el juicio por los crímenes de Campo de Mayo.

 Sus abuelos

La Abuela Vilma Delinda Sesarego de Gutiérrez nació en Arenasa, un pueblo cercano a Lincoln, provincia de Buenos Aires. Era maestra. Su marido, Oscar Rómulo Gutiérrez, era un médico de origen boliviano, nacido en Santa Cruz de la Sierra.

Ante la desaparición de su hijo y su nuera embarazada, Vilma salió a buscarlos. Junto a otras once mujeres fue una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo.

Sus compañeras la recuerdan como muy lúcida y suspicaz, dicen que era difícil engañarla con datos o denuncias falsas. Cuando las primeras reuniones de las Abuelas se realizaban en la provincia de Buenos Aires, muchas veces se hacían en su casa de San Justo.

Entre las innumerables gestiones que realizaron para intentar encontrar a sus familiares desaparecidos, el abuelo Oscar llegó a entrevistarse con el genocida Jorge Rafael Videla en Bolivia.

La Abuela Vilma falleció hace solo dos años sin poder abrazar a su nieta. Sin embargo, la nueva nieta tiene dos tíos que podrán contarle sobre su luchadora Abuela.

La Abuela Rosa González era cordobesa y su marido, Fredervindo Acuña, correntino. Ella era peluquera y modista y llegó a ser delegada gremial en una fábrica textil. Su esposo trabajaba en la Marina Mercante, en un puesto menor. La familia siempre vivió en el partido de San Martín.

Junto a Vilma, Rosa se sumó a la búsqueda de su nieta nacida en cautiverio, pero también falleció antes del encuentro.

 El caso

El 31 de octubre de 2013, una joven se acercó a Abuelas de Plaza de Mayo con dudas sobre su identidad. Durante la entrevista con el equipo Presentación Espontánea, relató que quien figuraba como su madre en la partida de nacimiento le había contado que el 31 de diciembre de 1976 había sido entregada por personal de la Policía Bonaerense a quien figuraba como su padre, también miembro de esa fuerza. La historia que le narraban decía que había sido encontrada abandonada en la Ruta 2, en Florencio Varela, por policías que, como sabían que el matrimonio apropiador tenía otro hijo no biológico, le ofrecieron a la beba.

Por otra parte, desde 2011 existía también una denuncia, con sospechas de que podía ser hija de desaparecidos.

Luego de su acercamiento a Abuelas, la joven fue derivada prontamente a la Conadi y, el 8 de noviembre de 2013, el BNDG realizó el análisis de ADN. Ayer, ese organismo informó el resultado: es hija de Liliana Acuña y Oscar Gutiérrez.

Una vez más, a pesar del tiempo transcurrido y las huellas que intentaron borrar, la verdad triunfa sobre la mentira. Sin embargo, no deja de dolernos que las Abuelas Vilma y Rosa no hayan podido conocer a su nieta.

El tiempo corre, los familiares quisiéramos tener la posibilidad de abrazar a nuestros nietos y nietas que desde hace más de 36 años estamos buscando.

Ya son hombres y mujeres, muchos tienen hijos, trabajo, amigos. Las Abuelas deseamos con la urgencia del tiempo que corre que se animen a enfrentarse con su historia. Les ofrecemos certezas, respeto a sus necesidades. A ellos y ellas les repetimos que no están solos, que los espera la libertad.