En el marco de la convocatoria a la actividad negacionista del terrorismo de Estado y del genocidio, convocada para el lunes 4 en la Legislatura porteña, es prioritario recordar y reflexionar sobre las dolorosas consecuencias de la última dictadura cívico-eclesiástica-militar en la historia de nuestro país.
Negar las acciones delictivas de quienes sostuvieron ese plan es una falta de respeto a las víctimas y a la sociedad en su conjunto. La negación perpetúa el dolor y la impunidad, socavando la construcción de una sociedad justa y democrática.
Para ello, la MEMORIA es esencial para comprender el pasado y evitar que se repitan los horrores del terrorismo de Estado en el futuro; y a través de la VERDAD y la JUSTICIA se pueden sanar las heridas del pasado y construir un futuro basado en el respeto a los Derechos Humanos y la dignidad de todas las personas de nuestra generación y de las generaciones venideras.
Por ello, debemos seguir confiando en que los juicios por Memoria, Verdad y Justicia sigan adelante para arrojar luz sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos contra nuestrxs compatriotas; y garantizar que los responsables rindan cuentas por sus acciones.
En este contexto, es nuestro deber como Agremiación de Docentes Universitarios apoyar a las víctimas, apoyar las demandas de justicia; y trabajar juntos para construir un presente donde el terrorismo de Estado y la impunidad no tengan lugar. La negación no sólo es una falta de respeto, sino un obstáculo para la democracia y la posibilidad de construir una sociedad más justa e igualitaria.
A 40 años de Democracia, decimos: Nunca más!!!
Mesa Ejecutiva
a.d.u.m.
