Desde hace muchos años y desde la fundación misma de ADUM dónde se estableció
que deberemos …»bregar por la vigencia de las instituciones democráticas que elija la
sociedad, por las libertades colectivas e individuales, por los derechos humanos,
defendiendo permanentemente el derecho de sus afiliados a peticionar, manifestar en
apoyo de sus reivindicaciones y ejercer tales libertades, …» desde el gremio participamos,
convocamos y organizamos innumerables acciones destinadas difundir la problemática
de derechos humanos en nuestro país. En el año 2005 tuvimos la oportunidad de poder
acompañar a los familiares de Gladys García, estudiante desaparecida de la Facultad de
Ingeniería de la UNMdP quien había sido identificada por el Equipo Argentino de
Antropología Forense -EAAF, colaborando desde el gremio en los últimos momentos de
la restitución de sus restos. Por entonces y como una actividad más de las tantas
promovidas desde ADUM, fuimos parte de la convocatoria para que los familiares de
desaparecidos donaran muestras de sangre tendientes a conformar una base de datos
genéticos que serviría como patrón para la posible identificación de restos de sus
familiares. Sintiendo la obligación de colaborar pero también de continuar realizando
todo lo que fuera necesario para recuperar los restos de mi hermana, fue en esa
oportunidad en la que mi madre y yo participamos de esa convocatoria junto a
muchos familiares de Mar del Plata y de varias ciudades de la zona. Hace un año los
integrantes del EAAF nos comunicaron que habían identificado los restos de
«MARU» MARÍA EUGENIA SANLLORENTI, y recientemente, el Juez a cargo
del caso comunicó la decisión de su restitución a sus familiares.
El próximo 29 de octubre familiares, amigos de ella y nuestros, y representantes
de organismos de Derechos Humanos nos reuniremos a las 11 hs cuando
lleguen sus restos a Tandil y le rendiremos homenaje.
Resulta importante transmitir que a pesar de lo ingrato que resulta no tenerla a ella
con su alegría, vivacidad, calidez y compañerismo cómplice que todos extrañamos,
esta no deja de ser una buena noticia. Saber qué fue de ella, aún 35 años después,
permite cerrar un ciclo que muchas familias de desaparecidos quisieran realizar.
Reina en nosotros la sensación de que en Argentina se está haciendo justicia.
De hecho la identificación surge precisamente de un expediente judicial y su caso se
convierte en una prueba más del terrorismo de Estado. Pero esa sensación también
está alimentada por saber que uno tras otro se están realizando los juicios a represores,
y que estos juicios fueron posibles por la anulación de las leyes de Obediencia Debida
y Punto final, y porque se entendió que los crímenes cometidos por el terrorismo de
Estado fueron considerados de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptibles.
Tanto por estas acciones concertadas por los actuales tres poderes constitucionales,
que representan nuestra democracia, como por sus resultados, y aunque varios de sus
efectos y seguidores claramente representados en los impulsores del modelo neoliberal
todavía persisten en su accionar, pareciera que cada vez más y de manera definitiva
estamos dejando atrás a esa feroz dictadura. Las desigualdades programadas entonces,
disminuyen, junto con el desempleo, el trabajo en negro, la incipiente industrialización.
No es poco haber recuperado el sistema previsional solidario a manos del Estado, ni
la Asignación Universal por Hijo que promovimos desde la CTA, ni la composición
de la actual Corte Suprema de Justicia. Tampoco lo es que tantos argentinos concurran
a votar en las últimas elecciones, mientras se siguen recuperando nietos e identificando
restos de desaparecidos.
A las 18 hs de ese mismo día y en la Escuela Normal de Tandil, escuela de la que egresó
MARU antes de partir a estudiar Arquitectura en La Plata, participaremos de la
presentación organizada por nuestra familia de las actividades del EAAF. Esta
oportunidad nos permitirá agradecer a sus integrantes por sobre su encomiable trabajo,
su profesionalismo, capacidad de contención y calidez humana. Ellos podrán exponer
sobre las tareas que desarrollan, seguramente sobre el caso que condujo a la
identificación de MARU y de los de los numerosos casos que permitieron la
identificación de detenido-desaparecidos en nuestro país. De esta manera e invitando
nuevamente a los familiares que no lo han hecho a donar sus muestras de sangre,
daremos cierre a la jornada.
Pedro Sanllorenti