16 / 08 / 2019 | Noticias culturales    

Entrada para afiliados de a.d.u.m. $ 100.- con la presentación del recibo de sueldo en la boletería.

Domingo 18 agosto, 16.00 y 18.00 hs. estreno exclusivo:

RICORDI?  (Ricordi?, Italia, 2018). Dirección y guión: Valerio Mieli. Fotografía: Daria D’Antonio. Edición: Desideria Rayner. Elenco: Luca Marinelli, Linda Caridi, Giovanni Anzaldo, Eliana Bosi, Camila Diana.  Duración: 106 minutos. Calificación: apta mayores 16 años.

Habría que celebrar que llegue a la Argentina una película italiana, dado que es inusual el estreno de films que no provengan de Hollywood en nuestra cartelera. Se sabe que la tradición cinematográfica de Italia es riquísima, y Ricordi? está a la altura de las circunstancias.

Retomando un tópico muy transitado -el derrotero de una relación amorosa, desde la fascinación inicial hasta la angustiante ruptura-, Valerio Mieli consigue un resultado muy original. Pone a funcionar la cámara como un lápiz bien afilado que dibuja la exaltación, la tristeza y la inestabilidad de los personajes en un cuadro deslumbrante, caracterizado tanto por la belleza como por la abstracción. Incorpora referencias literarias y pictóricas, en diálogo con un relato que viaja con mucha fluidez en el tiempo, reflejando el mundo interior de los protagonistas más que alguna verdad probada, y prescindiendo de la voz en off, un recurso frecuente en las estructuras narrativas que revisitan el pasado. Suele ocurrir que aquello que muchos cineastas entienden por poético termina siendo cursi, solemne o preciosista. Ricordi? juega al límite en ese sentido y sale indemne. Se apoya en un formidable trabajo de fotografía, una edición muy imaginativa, la complicidad de un elenco reducido y muy sobrio, y una banda sonora exquisita que agrega matices sin subrayar.Alejandro Lingenti,  La nación,  jueves 4 julio 2019

Domingo 25 agosto, 16.00 y 18.00 hs. estreno exclusivo:

NOTTI MAGICHE (Notti Magiche, Italia, 2018). Dirección: Paolo Virzi. Guión: Francesco Piccolo, Francesca Archibugi y Paolo Virzi. Fotografía: Vladan Radovic, Edición: Sara Petracca y Jacopo Quadri. Música: Carlo Virzi. Elenco: Giancarlo Giannini, Ornella Mutti, Mauro Lamantia, Irene Vetere. Duración: 125 minutos. Calificación: apta mayores 13 años.

Con la serie de penales de la semifinal Argentina vs. Italia como marco temporal y fondo musical de “Un verano italiano” –el célebre tema del mundial de fútbol 1990, cuyo estribillo le presta el nombre a la película–, un automóvil de lujo sale disparado desde un puente romano y ameriza con escasa elegancia sobre las aguas del Tíber. Dada la decepcionante coyuntura futbolística, muy poca gente en la terraza del bar cercano le presta atención al extraño objeto volador. Así comienza Notti magiche, el más reciente largometraje del toscano Paolo Virzì, fecundo realizador de quien en la Argentina se ha conocido una buena parte de su filmografía, incluidas Loca alegría, Tutti i santi giorni y El capital humano. Fecundo y ecléctico: sus películas suelen alternar el humor y el drama humano y social, muchas veces en un mismo relato.

    Estas “noches mágicas” se enrolan conscientemente en la tradición de la commedia all’italiana, con sus dardos venenosos aplicados, en esta ocasión, a la industria del cine. O, mejor dicho, al ocaso definitivo de sus épocas doradas, en la prehistoria del reinado de Berlusconi. El descubrimiento del cadáver de Leandro Saponaro, otrora un poderoso productor – tanto del más reputado cine autoral como de decenas de exitosos poliziotteschi– provoca la detención de tres jóvenes aspirantes a guionistas. También a un largo flashback que describe los acontecimientos y detalles que llevaron a la muerte del produttore (un Giancarlo Giannini al borde de la histeria, con guiños al muy real Cecchi Gori padre), en esencia un macguffin narrativo, al menos hasta los tramos finales. Lo que más parece preocupar a Virzì y a sus dos coguionistas es construir una sátira de ambientes, personajes, usos y costumbres, en ocasiones atinada e hilarante, en otras no tanto.  Antonino, Luciano y Eugenia    –los ternados para un concurso nacional de guiones cinematográficos, cada uno de ellos con características y rasgos de carácter muy definidos– hacen las veces de ventanas hacia un extraño microcosmos de escritores, realizadores y productores veteranos que llevan la marca del cinismo en cada frase que le prodigan al mundo. “Buona notte, va’ a fanculo”, se despide el sceneggiatore interpretado con alta gracia por el gran Roberto Herlitzka, un tal Fulvio Zappellini, homenaje encubierto a Furio Scarpelli, legendario creador de guiones, desde las primeras películas de Totò a Il postino. Por cierto, las decenas de referencias directas e indirectas a los grandes nombres ocultos del cine italiano –aquellos que trabajaban sentados delante de la máquina de escribir– pueden pasar desapercibidos para una parte importante de la audiencia, aunque no así la inclusión entre sombras de un Marcelo Mastroianni (llorando desconsoladamente por el enésimo abandono de la Deneuve, esa “stronza”) o de un Federico Fellini rodando la última escena de su canto de cisne, La voz de la luna.

   El trío de jóvenes, algo ingenuos en cuanto a las prácticas reales del oficio, intenta insertarse profesionalmente con sus creaciones, pero lo que encuentranson grandes nombres venidos a menos, “autores” dispuestos a conceder toda clase de libertades y un estado general de desesperanza. Entre apunte y apunte, la trama avanza a velocidades nada desdeñables, saltando de una escena a otra, y si algo no le falta aNotti magiche es ritmo. Esa cualidad de sketches contenidos en sí mismos puede ser entendida como un demérito general, pero en ocasiones se transforma en virtud. Los mejores momentos del film se imponen como aguafuertes de un mundo en decadencia que insiste en hacer gala de los lauros pretéritos, falsos espejos de los oropeles presentes.Diego Brodersen, Página 12, jueves 16 junio 2019

10 / 05 / 2019 | Actividades ::Noticias culturales    
 
 
 

Videoteca Universitaria, Sala Rodante INCAA no Comercial

Secretaría de Comunicaciones y Relaciones Públicas y Secretaría de Extensión de la UNMdP

y CTA Mar del Plata

Presentan:

6° Edición del Ciclo Cine Documental Político Argentino y Latinoamericano 2019.

El mismo se desarrollará todos los lunes a las 18.30 hs, desde mayo a noviembre, en la Sala Melany del Complejo de Arte MDQ Roxy – Radio City – Melany , ubicada en San Luis 1750, con entrada libre y gratuita.

Como ocurre desde hace 6 años el programa reúne producciones argentinas y latinoamericanas vinculadas a problemáticas sociales actuales, desde una perspectiva política.

El Ciclo inicia el lunes 13 de mayo, con el estreno de «Dedo na ferida» (El dedo en la herida) una película de Silvio Tendler (Brasil-2017) .En tiempos sombríos, en los que el mundo se enfrenta a la pérdida progresiva de derechos sociales y al resurgimiento de movimientos de extrema derecha, este documental, se afirma como una película incomodamente actual. Con la precisión de una mirada tallada en más de 80 obras de cuño histórico y social, el director trata del fin del estado de bienestar social y de la interrupción de los sueños de una vida mejor para todos, en una coyuntura donde la lógica homicida del hombre, el capital financiero inviabiliza cualquier alternativa de justicia social.

Lxs esperamos.

10 / 05 / 2019 | Noticias culturales    

Entrada para afiliados de a.d.u.m. $ 100.- con la presentación del recibo de sueldo en la boletería.

Domingo 12, 16.00 y 18.00 hs. Estreno exclusivo: LA CULPA​ (Den Skyldige, Dinamarca, 2018). 

Dirección: Gustav Moller. Guión: Emil Nygaard Albertsen y Gustav Moller. Fotografía: Jasper Spanning. Música: Carl Coleman y  Caspar Hesselager. Edición: Carla Lufe Heintzelman. Elenco: Jacob Lohmann, Jakob Cedergren, Jessica Dinnage, Johan Olsen. Duración: 85 minutos. Calificación: apta mayores de 16 años.

Desde la fría Dinamarca nos llega este claustrofóbico e intenso thriller protagonizado por un solo rostro, el del actor sueco-danés Jakob Cedergren y varias voces que suenan de fondo para dibujar una banda sonora trepidante que toca temas como la culpa, la enfermedad, la consciencia, la mentira o la violencia doméstica.

Asger Holm es un policía relegado a trabajar atendiendo llamadas de emergencias a la espera de ir a juicio por un caso en el que está implicado. En un principio vemos cómo atiende de manera rutinaria llamadas que desenmascara en cuestión de segundos. Pero esa noche también recibe una que le marcará para siempre, la de una mujer (Iben) que, entre sollozos, dice haber sido secuestrada.

Asger se implica de inmediato con la intención de ayudarle y recluido en su mesa de la centralita de emergencias con un auricular telefónico en su cabeza y con la ayuda de otros agentes se vuelca en dar con el vehículo donde se encuentra Iben. El agente moviliza sin descanso a sus compañeros e incluso se pone en contacto con un amigo para desplazarse a la casa del presunto secuestrador. Todo ello a la vez que intenta calmar por teléfono a la hija de la mujer, a la que promete que su madre regresará sana a casa.

The Guilty (cuya traducción en español sería ‘El culpable’) recuerda bastante a la tensión que nos transmitía Ryan Reynolds en Buried, de Rodrigo Cortés, o aquella Locke en la que un extraordinario Tom Hardy se pasaba todo el filme conduciendo y hablando por teléfono. Personajes que llenaban con su sola presencia toda la trama de la historia. Aquí es Cedergren el encargado de llevar él solo todo el peso de un relato de 85 minutos gracias a una actuación sólida en la que sus expresiones faciales y las voces en off que escuchamos de otros personajes dan vida a una trama con giros de guión inesperados y situaciones que encogerán el corazón, a la vez que el protagonista e interlocutora acabarán revelando sus propios pecados. Así pues, el espectador se monta su propia película a golpe de conversaciones telefónicas basándose en una trepidante acción que nunca vemos reflejada en pantalla.

Al debutante director Gustav Möller no le tiembla el pulso a la hora de diseñar una trama inteligente cuyos ingredientes va dosificando hasta conseguir dejarnos con un nudo en el estómago. Ganadora del premio del público en Sundance, The Guilty opta a tres galardones del cine europeo y es la candidata danesa a los Oscar. Astrid Meseguer, La Vanguardia, Barcelona 23 noviembre 2018

15 / 03 / 2019 | Noticias culturales    

Entrada para afiliados de a.d.u.m. $ 100.- con la presentación del recibo de sueldo en la boletería.

Domingo 17, 16.30 y 18.30 hs. Estreno exclusivo: nominada el Oscar 2019 mejor film idioma extranjero

SOMOS UNA FAMILIA (Manbike Kazoku / Shoplifters, Japón 2018). Dirección, guión y edición:  Hirokazu Kore-eda. Fotografía: Ryûto Kondô. Música: Haruomi Hosono.  Elenco: Kirin Kiki, Sôsuke Ikematsu, Lily Franky y Moemi Katayama. Duración: 121 minutos. Calificación: apta mayores 16 años.

    Ganadora de la Palma de Oro en el último Festival de Cannes y flamante nominada al Oscar a mejor film en idioma extranjero, la nueva película del director japonés de After LifeDistanciaNadie sabeDe tal padre, tal hijoNuestra hermana menor y Después de la tormenta es una suerte de compendio y culminación de su brillante trayectoria. Una mirada cuestionadora y al mismo tiempo profundamente humanista sobre la familia, la marginalidad y el amor que va más allá de los lazos de sangre en el contexto poco amable de una sociedad dominada por el prejuicio, el cinismo y la hipocresía.

   En un departamento minúsculo ubicado en las afueras de Tokio conviven hacinadas tres generaciones (desde la abuela hasta el nieto preadolescente) de una familia disfuncional, casi marginal, pero al mismo entrañable y querible. Padre e hijo se especializan en robos hormiga en supermercados. Y, cuando encuentran a una niña atribulada por la violencia de su hogar, la adoptan (¿la secuestran?) sin dar aviso a nadie.
  Ese es el punto de partida del nuevo largometraje del director que se ubica además entre los mejores trabajos de su prolífica filmógrafía (tiene varios puntos de contacto con Nadie sabe cuando describe la dinámica de los chicos sin supervisión adulta).
  Por su temática cualquier podría intuir con razón que se trata de una denuncia horrorizada de niños explotados y forzados al ejercicio del hurto, pero en verdad se trata de una mirada compasiva, en la que no se juzga (no se exalta ni se maltrata) a sus criaturas. Cine inteligente, profundo, humanista, sensible. Con el sello único del creador de After LifeUn día en familia y Después de la tormenta. Reseña 1: Diego Batlle (Otros Cines).

   Con su apuesta por una emotividad discreta y una austeridad formal, Somos una familia, de Hirokazu Kore-eda, se desmarca de toda noción de espectacularidad. Como suele ocurrir en la obra del cineasta japonés, aquí los significados emergen de forma transparente, perfectamente integrados en una escritura fílmica de corte clásico. 
  En esta ocasión, Kore-eda decide contar la historia de una excéntrica familia que sobrelleva sus penurias con una bonhomía contagiosa. Los empleos de los padres (Lily Franky y Sakura Ando) apenas garantizan el sustento económico familiar, que se alcanza gracias a la pensión que recibe la “abuela” (Kirin Kiki), gracias al trabajo de una hija mayor (Mayu Matsuoka) en un club de contactos eróticos y gracias a los pequeños hurtos que realiza el patriarca del clan junto a los dos hijos pequeños. 
  El director no oculta al espectador los aspectos más inquietantes de este retrato familiar: el padecimiento económico, el cuestionable uso de los niños para realizar robos, o el estado de alienación inherente al trabajo sexual de la chica mayor. Sin embargo, lejos de juzgar tajantemente a sus personajes, el realizador de After Life observa a sus criaturas con indudable cariño, abrazando su cotidianeidad casi como si se tratara de un ejemplo heroico de supervivencia tanto material como emocional.
   Este contraste entre la sospecha de posibles faltas morales y la evidente simpatía que despiertan los personajes –seres humanos que sufren y aman– genera un sugerente territorio de ambigüedad en la relación del espectador con el film. Una ambigüedad que irá in crescendo a medida que la trama vaya exponiendo la cara más siniestra de la realidad de los protagonistas. Un audaz ejercicio de dramaturgia que pone de manifiesto la mirada desprejuiciada y humanista de Kore-eda. 
De hecho, Somos una familia puede verse como una suerte de compendio de ciertos intereses expresados por el cineasta japonés en anteriores films. Ahí está, por ejemplo, la preocupación por el bienestar de los niños en una sociedad incapaz de cubrir las necesidades los más necesitados, un tema que vertebraba Nadie sabe. O también el estudio de los vínculos paterno-filiales en la destacable De tal padre, tal hijo, donde dos familias (una rica, otra pobre) descubrían que sus hijos habían sido intercambiados al nacer. ¿Qué da lugar y forma a un lazo de parentesco? ¿Es la consanguineidad la variable determinante? ¿O quizá debe prevalecer el factor afectivo? Complejos interrogantes que la obra de Kore-eda aborda con humildad y valentía, interpelando a la conciencia y a la emotividad del espectador sin caer en el sentimentalismo. Un cine que sabe camuflar la urgencia de su denuncia social bajo el delicado acercamiento a una serie de odiseas cotidianas. Una cuestión de pura humanidad.

Reseña 2:  Manu Yánez (Otros Cines).

Domingo 31, 16.30 y 18.30 hs. nominada el Oscar 2019 mejor film idioma extranjero,  mejor dirección y mejor fotografía y mejor Dirección Festival Cannes 2018 

COLD WAR (Zimna Wojna, Polonia/Francia/Reino Unido, 2018),  Dirección: Pawel Pawlikowski . Guión: Pawel Pawlikowski y Janusz Glowacki. Fotografía:Lukasz Zal, Edición: Jaroslaw Kaminski. Elenco: Joanna Kulig, Tomasz Kot, Borys Szyc, Agata Kulesza, Cédric Kahn, Jeanne Balibar, Adam Woronowicz . Duración: 88 minutos. Calificación: Apta para mayores de 13 años.

En Cold War asistimos al encuentro, conexión, y amor evidente -y hasta justo- entre Zula y Wiktor a fines de los años 40, en la Polonia comunista: ella se presenta a un casting como cantante y bailarina folclórica y él es parte de los seleccionadores. Latroupe que se arma sufrirá las crecientes presiones del comunismo para que, por ejemplo, le canten a Stalin. Wiktor no es tan sumiso. Y Cold War nos muestra a estos amantes en diversas ciudades, incluso en la Europa del otro lado de la cortina de hierro, alejados el uno del otro en parte porque el molesto mundo que los rodea está lejos de colaborar con la construcción de un proyecto tan turbulento como lógico: el amor innegable entre estos dos seres.

Son separaciones, añoranzas, traiciones, acercamientos, reemplazos que no consiguen cortar un lazo ineludible, inevitable. Un melodrama conciso, con elipsis convencidas, filmado en blanco y negro y encuadrado con solvencia y singularidad y sin distracciones irrelevantes (como Ida, la película anterior de Pawlikowski, premiada con un Oscar),Cold War es cine del fuerte, del contundente, del que nos hace salir conmovidos y distintos de la sala. Una historia de amor trágica, asediada por el absurdo del mundo; una historia que tenía que perdurar pero se ve interrumpida por ruidos molestos y convicciones oportunistas.Un hombre y una mujer y un amor cuyas evidentes fortalezas resisten de la manera que pueden, en un relato que conmueve porque está absolutamente convencido de lo que nos expone. Y como si todo esto fuera poco, impone sin duda alguna la fotogenia fatal de la que probablemente sea la actriz más subyugante de la temporada: Joanna Kulig, comparada en algunas críticas con Jennifer Lawrence, más que nada porque hay escasez de referencias más atinadas. Kulig es tan fatal y voluble como Brigitte Bardot en El desprecio, y con el cambiante brillo de sus ojos puede construir o derrumbar todo lo que la rodea. Javier Porta Fouz, La Nación, 1 noviembre 2018

24 / 08 / 2018 | Actividades ::Noticias culturales ::Noticias Gremiales    

El día sábado 25 de agosto a las 16 hs. se proyectará en el canal 8 de la ciudad de Mar del Plata, la “Película de los 30 años de adum”.

La misma refleja, entre otras cosas, la paulatina organización colectiva bajo la forma de reuniones, asambleas y medidas de lucha que buscaban, y aún hoy, buscan garantizar condiciones de trabajo dignas para los trabajadores y las trabajadoras de la Universidad.

En fin, de la construcción de la Agremiación Docente Universitaria Marplatense en estos primeros 30 años se trata este documento visual.

Pedro Sanllorenti

Secretario General

a.d.u.m.

08 / 08 / 2018 | Noticias culturales    

Domingo 5 de agosto, 16.00 y 18.00 hs. preestreno exclusivo: festival  de Mar del Plata 2017,  premio  en competencia: mejor película y mejor actor
INVITACIÓN DE BODA (Wajib, Palestina 2017). Dirección: Annemarie  Jacir. Guión: Annemarie Jacir. Fotografía: Antoine Herbelé. Montaje: Jacques Comets. Elenco: Saleh Bakri, Mohammed Bakri, Maria Zreik, Lama Tatour, Tari Kopti, Monera Shehadeh, Samia Shanan, Ossama Bawardi, Jalil Abu Hanna, Ruba  Blal.  Duración: 96 minutos. Calificación: apta mayores 13 años.  PREMIOS: FESTIVAL DE CINE DE MAR DEL PLATA 2017: MEJOR PELÍCULA Y MEJOR ACTOR / FESTIVAL DE CINE DUBAI 2017: MEJOR PELÍCULA Y MEJOR ACTOR / FESTIVAL DE LONDRES 2017:  PREMIO DEL GRAN JURADO / FESTIVAL DE CINE AMIENS 2017: MJOR PELÍCULA Y PREMIO DEL PÚBLICO /  FESTIVAL DE CINE DE LOCARNO: PREMIO MEJOR DIRECCIÓN Y PREMIO DE JÓVENES.
     La guionista y directora palestina nacida en Belén Annemarie Jacir, nos ofrece en este su tercer trabajo largo de dirección, una comedia sutil y elegante en la que bajo la apariencia de un relato divertido, cuenta las vicisitudes de un hijo que desde la Italia donde vive, regresa a Belén con su familia cristiana, para ayudar en la boda de su hermana que está organizando su Padre a la manera tradicional. Bajo esta leve historia en apariencia, la directora nos ofrece un relato en el que sabe ir sembrando constantes puntos de interés que atrapan al espectador a la vez que nos muestra la vida cotidiana de una familia palestina en un Belén bajo la constante presencia israelí. En 2009 pudimos ver una obra anterior de ella, donde también se encargaba del guion y la dirección, La sal de este mar, en la que ya se podían apreciar las virtudes de su trabajo y que en la obra que nos ocupa alcanza la plena madurez.
   A lo largo de Invitación de boda (Wajib) podemos disfrutar de la excelente interpretación de los actores que nunca sobreactúan y en situaciones en las que vamos conociendo la vida de los palestinos de una manera indirecta, sin caer nunca en el panfleto ni el melodrama, pero a la vez sin dejar de mostrar los graves problemas bajo los que se desarrolla su vida diaria. Solamente en la escena final, podremos ver un intenso momento en el que saldrán a la luz muchos de esos problemas que se han ido mostrando de refilón durante el metraje, a través de la radio, con la que por cierto se inicia  Invitación de boda (Wajib), o de grandes personaje secundarios de una humanidad tal que enriquece el relato dotándole de gran profundidad. Todo ello sin perder en ningún momento la vis cómica bajo las constantes discusiones de padre e hijo a lo largo del film.
   Annemarie Jacir mantiene el ritmo, que en ningún momento se hace pesado ni lento como tantas veces ocurre en este tipo de obras, y sabe sacar de sus protagonistas grandes interpretaciones. Destaquemos en primer lugar al Padre interpretado por Mohammad Bakri, que además de actor es también director, que nos regala una extraordinaria interpretación contenida, llena de matices que hacen al personaje profundamente entrañable dentro incluso de sus contradicciones. La directora nos recuerda al gran Billy Wilder que también viniendo del guión, conseguía que el espectador comprendiera a sus personajes, aunque no compartiera sus decisiones. Junto a él, Saleh Bakri interpreta igualmente de manera contenida al hijo que ha venido de Italia y que siendo de otra generación no comparte la posición del padre aunque la respeta. Le hemos podido ver en otras obras anteriores como La Banda que nos visita (2007) o La Banda de las mujeres(2011).
   En definitiva, Invitación de boda (Wajib) es una comedia divertida, entretenida, que te mantiene todo el rato con la sonrisa en los labios a la vez que sabe mostrar la dura realidad bajo la que viven los palestinos, pero que respeta al espectador dejando que saque sus propias conclusiones sin echarle en ningún momento un discurso panfletario, por más que pudiera tener sobrados motivos para hacerlo. Altamente recomendable.  Chusé  Inazio Felices (El cine en las sombras).

 Domingo 12 de agosto, 16.00 y 18.00 hs. preestreno exclusivo:
AMORES FRÁGILES (Amori  che non sanno stare al mondo, Italia 2017).  Dirección: Francesca Comencini. Guión: Francesca Comencini, Francesca Manieri y Laura Paolucci. Fotografía: Valerio Azzali. Montaje: Ilaria Fraioli. Elenco: Lucia Mascino, Thomas Trabacchi, Valentina Belle, Iaia Forte.  Duración: 92 minutos. Calificación: apta mayores 13 años. NOMINACIONES: SINDICATO NACIONAL ITALIANO DE PERIODISTAS CINEMATOGRÁFICOS 2017: MEJOR ACTRIZ Y MEJOR ACTOR DE REPARTO / FESTIVAL DE CINE DE LOCARNO 2017: MEJOR DIRECCIÓN

«Antes que volver contigo me suicidio” no puede querer decir nada bueno. Pero para Claudia, sí. “¿Ves? Eso es una  declaración de amor”. No obtiene respuesta. Y no la obtiene porque Flavio no quiere que le escriba más por whatsapp ni se comunique con él. Esa obsesión amorosa de Claudia la lleva a extremos que aquí no vamos a contar, pero que cualquier alma desesperada podría -o no- llegar a comprender o, tal vez , imaginar.
Pero el problema de Claudia, según ella es que no sabe dónde está su amado. El problema es que los dos no están tras lo mismo. Y que ella es algo obsesiva compulsiva. Amores frágiles es un drama romántico, con algún toque de comedia, alguno de ellos motivado por la pasión desmedida devenida en aparente locura. “Eres violenta y te haces la víctima, y no seré prisionero de un sueño que no comparto”, le dice Flavio cuando aún era pareja. Fueron siete años, y estaban por contraer matrimonio. Ella llora. “Sos una topadora que no se detiene hasta alcanzar su objetivo”, insiste a las tres de la madrugada el (ex) amado. Hay charlas que hay que tener para conocer a la persona que uno tiene en frente, o al lado. Pero si le dicen “Te miro y sé que quiero estar contigo por siempre”… Francesca Comencini es hija de Luigi, el director de Pan, amor y fantasía (1953). La hija es más explícita en el retrato de la pareja. Aquí, le interesa Claudia, que como Flavio es profesora universitaria y que, desairada, cree encontrar en una estudiante lo que ya su ex no puede brindarle. Lo que busca Claudia es lo que el espectador debe descifrar. Porque Comencini deja abierta, quizá demasiado, la interpretación de lo que pasa por la cabeza y el corazón de su protagonista. Pablo O. Scholz, Clarin, jueves 19 julio 2018

Domingo 19 de agosto, 16.00 y 18.00 hs. preestreno exclusivo:
LUNA: UNA FÁBULA SICILIANA (Sicilian ghost story, Italia 2017). Dirección y guión: Fabio  Grassadonia y Antonio Piazza. Fotografía: Luca Bigazzi. Montaje: Cristiano Travaglioli. Música: Anton Spielman. Elenco: Julia Jedlikowska, Gaetano Fernandez, Coriine Musallari, Lorenzo Curcio. Duración: 122 minutos. Calificación: apta mayores 13 años.  PREMIOS DAVID DE DONATELLO 2018: MEJOR GUIÓN, FOTOGRAFÍA Y MEJOR DIRECCIÓN. FESTIVAL /  SUNDANCE 2017: MEJOR GUIÓN / FESTIVAL DE CINE ZAGREB  2017: MEJOR PELÍCULA.
    Cuando fue secuestrado por la mafia siciliana, Giuseppe Di Matteo tenía apenas 12 años. Corría 1993 y la sociedad italiana recibía esa impactante noticia que veinticuatro años más tarde retomarían, para llevarla al cine, Fabio Grassadonia y Antonio Piazza, los mismos de la celebrada Salvo (2013), otra historia de mafiosos, pero más seca y terrenal que Luna: Una fábula siciliana, exhibida y elogiada en la Semana de la Crítica de la última edición del Festival de Cannes y en el reciente Festival de Mar del Plata. El desenlace real de aquel secuestro tuvo tintes macabros, pero el foco de la película no está puesto estrictamente ahí.  Con pericia y mucha imaginación, los directores apuestan en su relectura por la cruza del thriller con la historia de un romance adolescente de aliento shakespeariano y la fantasía gótica. A medida que el relato avanza, la conexión sobrenatural entre los dos jóvenes protagonistas se hace más patente, una deriva que enriquece el notable trabajo de fotografía y de sonido.     Sugestivo, sombrío, melancólico y recargado de simbolismos, este film atípico plantea más interrogantes que certezas y se interna en los paisajes de la fábula y los cuentos de hadas de los hermanos Grimm. Transforma una realidad tortuosa e inapelable en una poética epopeya contra la violencia, el silencio y la complicidad abordada con la coraza indestructible del amor. Alejandro Lingenti, La Nación, 14 diciembre 2017.–

16 / 04 / 2018 | Noticias culturales    

CINE ARTE AUDITORIUM

40° aniversario 1978-2018

 

 

Entrada para afiliados $ 80.- (presentando el recibo de sueldo en la boletería)

 

Viernes 13, 16,30 y 18.30 hs.

LA MÁS BELLA (De plus belle, Francia 2017).

Dirección y guión: Anna-Gaelle Laval. Fotografía: Philippe Guilbert. Música: Alexis Rault. Montaje: Fréderic Baillehaiche. Elenco: Nicole García, Mathieu Kaassovitz,  Florence Foresti, Olivia Bonamy.Duración: 99 minutos. (AM 13 años).

 

No hay mucho debajo de la superficie de La más bella. Todo está a la vista y es bastante redundante: los conflictos, deseos y miedos de su heroína, Lucie; la estructura que cruza la comedia romántica con el drama de enfermedad; el arco dramático con sus puntos de inflexión calculados al milímetro. La ópera prima como realizadora de Anne-Gaëlle Daval (usualmente abocada al diseño de vestuario) la encuentra comandando un film amable y con pretensiones de masividad, una de esas historias que suelen señalarse como crowd-pleasers, cuyas idas y vueltas están orientadas a complacer a toda clase de audiencias. De plus belle es también un vehículo para su protagonista, la comediante Florence Foresti –poco conocida por estos pagos, pero muy popular en su país–, secundada por dos grandes nombres del cine francés, la actriz Nicole Garcia y el actor Mathieu Kassovitz, en ambos casos interpretando papeles unidimensionales, casi peones de la trama: respectivamente, la dueña de una particular pyme dedicada a la reconstrucción de la autoestima femenina y un locuaz y enérgico donjuán… (extracto) Diego Brodersen / Página 12 / 15 marzo 2018

 

Sábado 14, 16,30 y 18.30 hs.

BEATA IGNORANCIA (Beata ignoranza, Italia/2017).

Dirección: Massimiliano Bruno. Guión: Alessandro Bruno y Gianni Corsi y Hebert Paragnani. Fotografía: Alessandro  Pesci. Montaje: Consuelo Catucci.  Música: Maurizio Filardo. Elenco: Alessandro Gassman, Marco Giallini, Valeria Bilello. Duración: 102 minutos. (AM 13 años).

 

Ernesto (Giallini), profesor de lengua adusto y aplicado –al punto de matar de aburrimiento a sus alumnos con el recitado de poemas–, vive de manera algo ermitaña luego de la muerte de su esposa, lejos de las computadoras y teléfonos celulares (el televisor sólo se prende una vez al año, durante el discurso presidencial de balance). Filippo (Gassman), en cambio, vive pendiente de los likes en su muro de Facebook y utiliza en las clases de matemática una app personalizada que resuelve las ecuaciones de manera automática. Que ambos compartan en el pasado un amor romántico en común es apenas uno de los puntos conflictivos del presente, coronados por la presencia de la hija de ambos (biológica en un caso, de facto en el otro), una joven documentalista dispuesta a llevar a la pantalla la apuesta más inesperada. Y el gancho conceptual del relato: el techie vivirá un tiempo sin tener contacto con el mundo online; el otro deberá obligarse a estar conectado constantemente….. (extracto) Diego Brodersen / Página 12 / 21  setiembre 2017

 

Domingo 15, 16. 30 y 18.30 hs.

EN PEDAZOS (Aus dem nichts, Alemania-Turquía/2017).

Dirección: Fatih Akin. Guión: Fatih Akin y Hark Bohm. Fotografía: Rainer Klausmann.  Música: Josh Rainer Klausmann.  Música: Josh Homme. Montaje: Andrew Bird. Elenco: Diane Kruger, Denis Moschitto, 

Rumar Acar, Ulrich Tukur. Duración: 106 minutos. (AM 13 años). PREMIOS: GOLDEN GLOBE (USA 2018): MEJOR PELÍCULA EXTRANJERA; CANNES 2017: MEJOR ACTRIZ (DIANE KRUGER); ASOC. CRÍTICOS DE NEW YORK: MEJOR PELÍCULA EXTRANJERA.

 

EN PEDAZOS

 

    El director alemán de origen turco Fatih Akin encuentra en la Alemania contemporánea un territorio fértil para abordar la xenofobia y la violencia que atraviesan a Europa desde una mirada no exenta de subrayados y maniqueísmo. La explosión de una bomba en un barrio de inmigrantes de Hamburgo no solo destruye la vida de Katja (Diane Kruger), tras la muerte brutal de su marido y su hijo, sino que la sumerge en una oscuridad emocional cuya puesta en escena tiene más de calculado efectismo que de rigor y sutileza.

    Diane Kruger expresa los ecos de un interior fracturado en una historia que deriva hacia el cinismo de los villanos, el retrato pasivo de las comunidades afectadas e incurre en la irresponsable estética -eso sí, sin el disfrute culposo- del melodrama de venganza…. (extracto)  Paula Vázquez Prieto / La Nación /  15 marzo 2018

 

 

 

Domingo 22, 16. 30 y 18.30 hs. Estreno exclusivo:

LA COMUNIDAD DE LOS CORAZONES ROTOS (Asphalte, Francia/2016)

Dirección: Samuel Benchetrit. Guión: Benchetrit y Gabor Rassov. Elenco:Isabelle Huppert, Gustave Kervern, Valeria Bruni Tedeschi, John McKenzie. Música: Raphaël. Fotografía: Pierre Aïm. Edición: Thomas Fernandez. Duración: 100 minutos. (AM 13 años). PREMIOS: CESAR (FRANCIA): MEJOR GUIÓN.

 

Determinados encuentros improbables traen ternura, risas y compasión a un mundo de alienación urbana.
Un edificio en los suburbios de una ciudad francesa anónima. Un ascensor averiado. Tres encuentros improbables. Seis personajes insólitos. Un grandullón intratable y la frágil enfermera del turno de noche. Jeanne, una actriz en crisis y su joven vecino abandonado. Un astronauta americano perdido y la entrañable Sra. Hamida. Todos ellos seres solitarios unidos por un gran sentimiento de ternura, respeto y compasión.
John Mckenzie (Michael Pitt), un astronauta americano al final de su viaje se precipita sobre un edificio gris de las afueras de Paris. Recogido en la terraza por Hamida, una señora marroquí que lo acoge como a un hijo, Mackenzie espera que la Nasa lo encuentre y lo devuelva a casa. Un piso más abajo, la llegada de una nueva vecina, Jeanne (Isabelle Huppert), una vieja gloria del cine de los 80 hará despertar la curiosidad de Charlie, un adolescente solitario que vive con su madre casi siempre ausente. Invalido y aislado en la primera planta, el aspirante a fotógrafo Sternkowitz sueña con encontrar el amor. El encuentro con una frágil enfermera de noche (Valeria Bruni) obrará el milagro que lo hará bajar de su silla de ruedas. Todas Las críticas /  23 noviembre 2017

01 / 03 / 2018 | Noticias culturales    

Entrada para afiliados $ 80.- (presentando el recibo de sueldo en la boletería)

Domingo 4, 16.30  y  19.15 hs.

THE SQUARE (Suecia-Dinamarca-Alemania- Francia, 2017) / Guion y dirección:Ruben Östlund, Fotografía: Fredrik Wenzel. Edición: Jacob Secher Schulsinger y Ruben Östlund. Elenco: Claes Bang, Elisabeth Moss, Dominic West, Terry Notary y Christopher Læssø. Duración: 142 minutos Calificación: Apta para mayores de 16 años. NOMINADA PARA EL OSCAR 2018 Y EL GLOBO DE ORO A LA MEJOR PELÍCULA EXTRANJERA. FESTIVAL DE CANNES 2018: PALMA DE ORO A LA MEJOR DIRECCIÓN

 

   La decisión de otorgarle la Palma de Oro a The Square en la última edición del Festival de Cannes provocó una enorme polémica. Cineasta adicto a la provocación -muchos ya se habían indignado con Play (2011), la historia de un grupo de niños negros pobres que robaban a otros de su misma edad, pero blancos y de clase media-, el sueco Ruben Östlund había logrado un punto de equilibrio con Force Majeure: la traición del instinto, un film sobre el matrimonio como cataclismo.

   Esta vez, el blanco de sus dardos envenenados es el mundo del arte contemporáneo, sintetizado en la figura del particular director de un museo sueco que no tiene presupuesto para estar a la altura de sus competidores internacionales. Torpe para entablar relaciones, egomaníaco, más de una vez indolente y ciertamente paranoico, Cristian (el personaje interpretado con mucha eficacia por el danés Claes Bang) se ve envuelto en una serie de episodios problemáticos que Östlund narra con humor y un evidente cinismo: desde el montaje de una obra de aspiración altruista de una artista argentina que empieza con la desprejuiciada destrucción de la estatua de un monarca hasta la virulenta aparición en escena de un apremiante hombre-mono que produce una verdadera debacle en una cena de burgueses aterrados, pasando por una insólita trama persecutoria contra un niño, desatada para recuperar un teléfono celular que le roban al protagonista en un confuso incidente callejero.

   No hay tópico al que el director se acerque sin mordacidad: la sexualidad (es tan tensa como hilarante la escena que protagoniza con el personaje de Elizabeth Moss en torno al destino de un preservativo usado), las relaciones familiares, la hipocresía de las clases acomodadas… En una entrevista reciente, Östlund explicó que uno de los modelos para su película fue Cuento de Navidad, una novela de Charles Dickens también cargada de críticos simbolismos relacionados con la sociedad de su época. Publicado en 1843, el relato de Dickens cuenta la historia de un hombre avaro y egoísta que que transforma tras ser visitado por una serie de fantasmas en Nochebuena. La novela consiguió un inmediato éxito y el aplauso de la crítica. En la línea de colegas como Michael Haneke y Lars von Trier, pero con aún menos sutilezas, el realizador sueco enfoca la mala conciencia de sus personajes para erigirse en un nuevo misántropo del cine. Alejandro Lingenti (extractos), La Nación, 16 de noviembre 2017.

 

 

Domingo 11, 16.30 y 19.15 hs.

12O PULSACIONES POR MINUTO (120 battements par minute, Francia/2017), Dirección: Robin Campillo. Guión: Robin Campillo y Philippe Mangeot. Fotografía: Jeanne Lapoirie. Edición: Robin Campillo, Stephanie Leger y Anita Roth. Música: Arnaud Rebotin. Elenco: Nahuel Pérez Biscayart, Adèle Haenel, Yves Heck, Arnaud Valois. Duración: 143 minutos. Calificación: apta para mayores de 16 años.  FESTIVAL DE CANNES 1017: PREMIOS: FIPRESCI A ROBIN CAMPILLO, GRAN PREMIO DEL JURADO A LA MEJOR DIRECCIÓN, PALMA QUEER A LA MEJOR DIRECCIÓN.

   Las cosas no eran fáciles para los infectados con VIH en los años 90. Se sabía mucho menos que hoy de la patología y los prejuicios eran moneda corriente también en países del Primer Mundo como Francia, donde está ambientada esta gran película de Robin Campillo que pone el foco en la intensa actividad de Act Up, colectivo militante del que el director formó parte. Dedicado a llamar la atención sobre la negligencia del gobierno de François Miterrand y la impiadosa industria farmacéutica ante la epidemia, Act Up hizo mucho por los derechos de los afectados en ese país. Y 120 pulsaciones por minuto narra esa cruzada con contundencia y un notable aliento poético. Es un film de una enorme emotividad, pero desprovisto de golpes bajos, que se atreve a introducir una gran historia de amor en medio del fragor de la lucha política. Uno de los protagonistas de esa trama sentimental es el personaje interpretado por el argentino Nahuel Pérez Biscayart, cuya actuación es realmente descomunal. Campillo sabe cómo cruzar lo público con lo privado sin que aparezcan fricciones: la fluidez entre los momentos dramáticos y festivos de la historia, apoyados por una preciosa banda sonora, es ejemplar. Su estilo cinematográfico, en algunos tramos de corte casi documental, recuerda al de Laurent Cantet. No es casual: Campillo fue guionista y editor de Entre los muros, excepcional film de ese director francés. Alejandro Lingenti, La Nación, 17 de enero, 2018.

Domingo 18, 16.30 y 18.30 hs.

EL DÍA DESPUÉS (Geu-hu, Corea del Sur, 2017). Dirección, guión,música: Hong Sang-soo. Montaje:  Sung-Won  Hahm. Fotografía: Kim Hyung-u Elenco: Kwon Hae-hyo, Kim Min-hee, Kim Sae-byuk, Cho Yun-hee. Duración: 92 minutos. Calificación:apta para mayores de 13 años. NOMINACIONES EN LOS FESTIVALES DE SAN SEBASTIÁN, MUNICH, ROTTERDAM, CANNES, 2017.

   

   El  año pasado, Hong Sang-soo dirigió tres largometrajes. Dos de ellos: La caméra de Claire y El día después, que se estrena ahora en la Argentina- fueron exhibidos en la última edición del Festival de Cannes, una plaza acostumbrada para este coreano que suele filmar con presupuestos módicos y multiplicarse en diferentes tareas: guión, dirección, producción, música.

   Se suele decir que las películas de este autor tan prolífico (unos veinte largos en otros tantos años de carrera) se parecen entre sí, y es indudablemente cierto. Por lo general hay en el centro de la escena un hombre que detenta alguna clase de poder (un crítico y editor prestigioso, en este caso) que se encuentra frente a una encrucijada amorosa.Esta vez, el protagonista es Song Haejoo, un seductor empedernido y no muy dispuesto a hacerse cargo de las consecuencias de sus aventuras. Está casado, pero tiene una amante que trabaja con él en una oficina atestada de libros y papeles. Su mujer, una dama elegante y temperamental, lo intuye. La amante decide entonces dejar el trabajo y es reemplazada por una jovencita cándida y atractiva que también despierta el deseo de su flamante jefe. A partir de ahí ocurre lo habitual en las películas de este director: una serie de conversaciones en almuerzos y cenas regados de alcohol que cruzan insinuaciones amorosas, angustias existenciales y confesiones incómodas.Lo que dinamiza la narración en esta oportunidad son los juegos con la temporalidad, que permiten observar las constantes en el indolente comportamiento de un protagonista egocéntrico, casi siempre deprimido y señalado como posible alter ego del director, enredado últimamente en un melodrama intenso y muy publicitado por la prensa de su país con una de sus actrices fetiche, Kim Min-hee, veinte años menor que él y de muy buen trabajo en este film. Eficaz y atildado, el cine del realizador coreano tiene referentes decenas de veces señalados, de estirpe puramente francesa -Eric Rohmer, Philippe Garrel-, pero también una identidad propia, elaborada minuciosamente durante dos décadas en las que pulió un estilo que ya se vuelve inconfundible. Alejandro Liingenti. (extractos). La nación 28 diciembre, 2017.

01 / 09 / 2017 | Noticias culturales    

Entrada para afiliados $ 60.- (presentando el recibo de sueldo en la boletería)